Así lo desvela un estudio realizado por USA Today y Bookish, la web de búsquedas, compras y recomendaciones de libros, en el que se analizan las principales variantes que el ámbito online genera en la manera de leer.
Las nuevas tecnologías no sólo están transformando la manera en que se producen los libros, sino también la forma de consumirlos. La encuesta de USA Today desvela que ha aumentado el número de adultos que posee una tablet o un e-reader, alcanzando ya al 40% de la población, más del doble que hace dos años, lo que demuestra un creciente interés por el formato digital.
Las cifras se elevan aún más en el caso de aquellos que tiene una titulación universitaria o elevados ingresos (75.000 dólares). Y es que los aspectos económicos y educativos están íntimamente relacionados con la popularidad de la lectura online.
Pero, ¿en qué se traduce la posesión de un dispositivo electrónico de lectura? Según el estudio, en un mayor consumo. De hecho, un 35% de los que poseen un e-reader o una tablet lee más ahora que antes, elevándose la cifra hasta el 41% en el caso de los más jóvenes, aquellos comprendidos entre los 18 y los 39 años de edad. Eso sí los lectores digitales priorizan la ciencia ficción (es el tipo de libro escogido por el 23%), frente a otro tipo de contenidos más densos. Como ya han mostrado otras investigaciones, parece que el formato electrónico no es muy popular para la no ficción, que sólo atrae al 14% de la audiencia.
La razón de este incremento parece estar en la portabilidad de los libros digitales, su precio más bajo y su mayor accesibilidad. Según publicaba USA Today, Peter Osnos, fundador y editor general de PublicAffairs Books, cree que en la “accesibilidad” es la clave de la publicación digital. Similar es la opinión de Michael Norris, analista de la publicación de información Simba, que señalaba que “es más probable que una persona con bicicleta de paseos en bicicleta. Si alguien tiene un dispositivo, tiene acceso a los libros a los que antes no tenía, y muchos de ellos son gratuitos”.
El panorama digital también está cambiando la forma en que se descubren los libros, que tienen en Internet y en las redes sociales su mayor escaparate. Y son los más jóvenes, y por tanto los lectores más activos en redes sociales, los que más participan en Facebook, Twitter o plataformas similares para compartir sus opiniones. Concretamente, un 39 % de los menores de 40 años ha hecho comentarios online, siendo del 19% la participación en el caso de los mayores de 40. Así, el ‘boca boca’, la segunda razón para elegir un libro, tal y como reconoce un 43% de los encuestados (un 57% se basan en los trabajos anteriores del autor para hacer su selección), también se está haciendo digital.