Los cierres de las revistas “On Madrid” de “El País” y “Magazine” de “El Mundo” podrían calificarse de efectos colaterales de una crisis que está ahogando a los periódicos más importantes de nuestro país. Mientras tanto, en Francia, diarios como “Le Figaro” se sustentan gracias a sus suplementos. ¿Por qué los españoles no han sabido aprovechar el filón comercial de estos títulos?
La semana pasada, “El País” anunció el cese de la publicación del suplemento sobre ocio “On Madrid”, que se distribuía de forma gratuita en la Comunidad. Ya muy tocada tras ver reducidas sus páginas a la mitad desde su nacimiento hace siete años, la publicación estaba herida de muerte y finalmente será sustituida por la “Guía del Ocio”. A partir del viernes 20 de septiembre, será esta revista la que se distribuya los viernes junto al periódico.
Esta semana le tocaba el turno a “Magazine”, uno de los suplementos más emblemáticos. El 31 de octubre será el último fin de semana en el que “El Mundo” editará la revista. Este cierre pone de manifiesto la difícil situación en la que se encuentra Unidad Editorial, presionada por los dirigentes de RCS. Hartos de las pérdidas económicas de hasta 14 millones de euros en la primera mitad de 2013 de su filial española, la compañía no ha tenido más remedio que llevar a cabo reajustes de plantilla y el cierre de sus suplementos. Porque después de “Magazine”, el siguiente puede ser “Metrópoli”.
Mientras que los medios españoles no han sabido rentabilizar el filón publicitario de sus magazines, en Francia diarios como “Le Figaro” obtienen mayores ingresos de sus revistas que con la publicidad del periódico.
Así, títulos como “Madame Figaro” o “Le Figaro Magazine” contribuyeron a generar unos ingresos que superaron los 230.000 euros en 2012, frente a 170.000 euros del periódico. Los anunciantes se decantaron por utilizar estas plataformas para recolocar sus anuncios en plena crisis de la publicidad en medios impresos.
¿Por qué en España no han sabido explotar comercialmente sus títulos gratuitos? Lo cierto es que los anunciantes que están sustentando a este tipo de medios son las empresas de belleza, moda y lujo, menos afectadas por la crisis económica y que encuentran en las revistas su mejor escaparate.
“Madame Figaro” incluía este mes hasta 33 páginas publicitarias. Su semejante en “El Mundo” es “Yo Dona”, pero al contrario que el título francés, se ha visto afectada por la fuga de anunciantes como ha ocurrido con otras cabeceras del grupo. Los datos reflejan que este año la recaudación con respecto a 2012 ha caído un 36%, además de dejar de distribuirse junto a “El Periódico de Catalunya” tras un año de colaboración.
El sector de las revistas femeninas en España está en fuerte recesión. La suma de los ingresos de “S Moda”, el suplemento de “El País”, “Mujer Hoy”, de Vocento y “Yo Dona” se escriben en negativo, con recaudaciones un 29% más bajas que el año anterior. La respuesta de Unidad Editorial ante este panorama puede ser la potenciación de su suplemento de lujo, pues este tipo de marcas aportarían mayor estabilidad económica e ingresos más elevados que los que proporcionan empresas de otros sectores afectados por la caída de las ventas.