El pasado jueves 15 de agosto la compañía de impresoras 3D MarkerBot entró en el mercado de la digitalización, introduciendo un dispositivo de escritorio denominado “Digitizer”, que ayudará a impulsar la impresión 3D al público.
El “Digitizer” (el digitalizador), que saldrá a la venta por 1.400 dólares, es capaz de girar objetos pequeños en un placa cerca de dos láser y una cámara, para así crear un modelo tridimensional que puede ser reproducido por una impresora 3D.
La empresa fue adquirida el pasado junio por Stratasys por 403 millones de dólares. Esta compañía cuenta con un replicado de la impresora 3D que se encuentra en la biblioteca Thingiverse y está a la venta en las tiendas de Microsoft.
Muchos expertos de esta industria aseguran que la revolución de la impresión 3D en los hogares no llegará hasta que se diseñen modelos de funcionamiento sencillo. Los escáneres, como el digitalizador, son una manera de simplificar el proceso, ya que permiten copiar, o modificar, objetos existentes. Sin embargo la propia empresa aseguró que " cualquier tecnología 3D de exploración está limitada por las leyes de la física." Aclaró esta afirmación añadiendo que por ejemplo el consumidor no va a poder comerse una reproducción escaneada de una hamburguesa.
MarkerBot lanzará esta nueva impresora al mercado a mediados de octubre. No es el primer escáner del mercado, ya que hay algunos más precisos, como NextEngine 3D, que, a diferencia del digitalizador, escanea a color. Sin embargo esta precisión eleva su precio hasta los 2.995 dólares.
Otros escáneres en 3D se encuentran en desarrollo, algunos financiados por las campañas en línea, como el Fuel 3D, que promete costar menos de 1.00 dólares, o el Matterform, que podrá salir a la venta en septiembre por solo 599 dólares.
La disponibilidad de estos nuevos objetos plantea interrogantes sobre los derechos de autor de los objetos físicos.