En 2017 unos 2.000 millones de personas utilizarán tablets y smartphones para ver vídeos no sólo en casa, sino también en movilidad, lo que incrementará el tiempo destinado al consumo de este tipo de contenido.
Ni segunda, ni tercera pantalla, los dispositivos móviles caminan para convertirse en la primera vía de acceso de los contenidos audiovisuales. Su éxito parece no tener límites y, sin duda, está cambiando la manera en que los usuarios hacen las cosas. En el último año, el tradicional televisor ha perdido importancia, siendo relevado por estos aparatos portátiles, mucho más pequeños y cada día dotados de mejoradas características tecnológicas.
Según un estudio elaborado por Juniper Research, esta tendencia se mantendrá durante los próximos años, situándose en unos 2.000 millones de personas la cifra de usuarios que verán la televisión o vídeos desde sus móviles o tabletas.
Para la consultora este fenómeno se explica por la popularidad alcanzada por los contenidos audiovisuales de corta duración y sus posibilidades de viralidad, y especialmente por los videoclips; así como por las mayores prestaciones y calidad de los dispositivos móviles, que cuentan cada día con procesadores más rápidos y pantallas mejoradas, que hacen que sean más atractivos.
Al incremento del consumo de contenidos audiovisuales desde los dispositivos móviles también contribuye el éxito de las plataformas de streaming, campo liderado por Netflix, que con más de 30 millones de usuarios se ha convertido en una clara amenaza para el modelo tradicional de televisión de pago.
Además, los dispositivos móviles, y especialmente las tablets, generarán una mayor demanda de contenidos audiovisuales. Tal y como apunta un estudio realizado por Bell Labs, la división de investigación de Alcatel-Lucent, la posibilidad de poder visionar vídeos en movilidad hará que en 2020 los estadounidenses pasen una media diaria de siete horas consumiendo vídeo, frente a las 4,8 actuales. Y es que, ya no los verán exclusivamente en casa, sino también en el trabajo, en los desplazamientos y casi en cualquier lugar. El vídeo bajo demanda y basado en la web será el que más crecerá, pasando del 33% al 77% la proporción de tiempo destinado a su consumo.