El Washington Post cobrará por sus contenidos a los usuarios frecuentes del diario digital a partir del verano. El límite se ha establecido a partir de 20 artículos al mes pero todavía no ha fijado el precio.
La portada del diario igual que la primera página de cada sección y las de anuncios clasificados continuarán siendo de acceso libre. Es más, los suscriptores de la edición impresa seguirán teniendo acceso gratuito a todos los productos digitales del Post, igual que los estudiantes, profesores, funcionarios y personal militar cuando accedan desde las escuelas o lugares de trabajo, según ha adelantado el propio diario en un artículo.
El diario norteamericano no había creado un paywall como otras publicaciones como The Wall Street Journal, Financial Times, The Boston Globe o The New York Times para evitar perder lectores y anunciantes.
Sin embargo, ahora Katharine Weymouth, editora del Post, ha reconocido que “los consumidores de noticias son inteligentes; y entienden el alto coste que supone mantener las noticias de calidad y los reportajes en profundidad que caracterizan al Post. Nuestro paquete digital es valioso y vamos a pedir a nuestros lectores que paguen por ello y ayuden a apoyar nuestro periodismo como lo han hecho durante muchos años con la edición impresa".
En una entrevista, la editora del Post afirmó que "separar el modelo de edición impresa de los modelos de suscripción online no tiene ya sentido”, aunque confirmó que el Post todavía está estudiando cuáles son los honorarios que funcionan mejor.
Recientemente, el presidente y director ejecutivo del Washington Post, Donald E. Graham, había mostrado su preocupación por los posibles efectos adversos que puede acarrear el cobrar por los contenidos digitales. "Estamos mirando paywalls de todo tipo, pero no hemos adoptado ninguno porque no hemos encontrado uno que genere beneficios”.
The Washington Post se caracteriza por tener un gran negocio con la publicidad local de su edición impresa mientras que el 90% de la audiencia online se encuentra fuera del área de Washington. La preocupación de Graham es que con el paywall el diario pierda audiencia digital y también anunciantes. La publicidad digital representa aproximadamente una quinta parte de la publicidad total del diario.