La gestora del satélite luxemburgués no supera su fracaso comercial durante la veintena de años que lleva en España. Ahora aprovecha el resquicio del dividendo digital para reclamar una neutralidad tecnológica que no tiene sentido. La televisión ha sido terrestre en España desde hace cincuenta años, o sea, desde sus inicios. Y el dividendo digital es una necesidad obligada para dar a los operadores móviles las frecuencias ocupadas por la TDT, y estar en consonancia con el resto del mundo en sus próximos despliegues de red. No hay subvención estatal a la TDT, como insiste Astra de forma torticera. Explicamos las realidades que contestan a sus amenazas.
NO HAY SUBVENCIONES A LA TDT. El problema económico que vive España explica el único problema del dividendo digital. Los 800 millones dedicados a realizarlo, desembolsados por los operadores móviles, han ido a enjugar el déficit. La plana mayor de Astra sigue tergiversando, en sus últimas declaraciones a Europa Press. Insiste en que el gobierno no debe conceder ayudas a la TDT, y ahonda en su denuncia a Bruselas en pro de una supuesta neutralidad tecnológica. No hay subvenciones, la administración tramita el pago realizado por los móviles a las cadenas TDT para que estas liberen un espacio que ellos necesitan para desplegar las redes 4G.
NO HAY PROBLEMAS TÉCNICOS EN TDT. En cuanto a los supuestos problemas técnicos con los que amenaza Astra, todavía no existen. Las autoridades y los técnicos españoles están estudiando el cambio de frecuencias para evitar cualquier problema. Empresas como Televés, Ikusi o Fagor tienen la mejor cualificación técnica europea en sistemas TDT, los están vendiendo por todo el mundo con gran éxito, y podrán solventar cualquier problema que pueda haber.
TENEMOS TDT GRATUITA. La televisión en España siempre ha sido terrestre, y formamos parte puntera del grupo de países que desarrolló la tecnología TDT para digitalizar la señal. 55 años de televisión terrestre y gratuita, han impedido a Astra vender sus servicios de televisión de pago por satélite en España. Los directivos de Astra recuerdan que en Francia hay cinco millones de usuarios que ven la TDT a través del satélite, y en Reino Unidos hay dos millones. En España solo hay 36.000 usuarios, y no por las “preferencia política” por la TDT, argumentados por Astra. Es porque los españoles estamos acostumbrados a una oferta gratuita de TDT, y por eso no queremos pagar a Astra por ver lo mismo. Astra ve fantasmas donde no los hay, y amenaza con cosas inexistentes para enjugar su inutilidad comercial.