Europa intenta vencer la crisis del euro y recuperarse de una situación económica adversa que necesita desesperadamente la tecnología start-up para estimular el empleo y generar crecimiento. La Comisión Europea ha hecho de la innovación en alta tecnología una piedra angular de su política económica. Los beneficios de Internet continúan acumulándose de forma desproporcionada en las empresas estadounidenses como Facebook, Apple, Amazon, eBay y Google, que a menudo tienen posiciones más dominantes en Europa.
Europa ha generado muchas empresas tecnológicas de éxito mundial como Rovio, creadora del juego Angry Birds para móviles, Spotify, el servicio de música en streaming o SoundCloud, un sitio web para compartir y almacenar música. En el último año, la actividad se ha intensificado en Berlín y Londres que se han convertido en capitales europeas de la innovación digital. Sin embargo, la mayoría de las empresas de Internet luchan por salir de los mercados nacionales. Lanzarse a nivel mundial significa generalmente la venta a un gigante de Internet de Estados Unidos o Japón -incluidas las prometedoras Tweet Deck, Last FM o Price Minister-.
Las razones por las que Europa no ha logrado crear Facebook o Google son muy complicadas según publica Eric Pfanner en el International Herald Tribune. Algunos analistas dicen que las nuevas empresas europeas se han centrado demasiado en copiar las ideas de Silicon Valley. Otros dicen que Europa carece de impulso empresarial y otros que la fragmentación de los mercados europeos, con decenas de idiomas y sistemas jurídicos, puede obstaculizar al más enérgico de los emprendedores.
Los investigadores de Bruegel, un think tank con sede en Bruselas, han identificado un problema fundamental: la escasez de financiación, especialmente de capital privado, por el riesgo que implica crear y desarrollar empresas de alta tecnología. ''Un deficiente mercado de capital riesgo puede obstaculizar la conversión de empresas jóvenes, altamente innovadoras, en líderes mundiales'', publicaban en un estudio reciente.
Los responsables políticos europeos también están intensificando sus esfuerzos para desarrollar grupos de alta tecnología basados en la innovación. La idea es replicar el ecosistema de Silicon Valley, donde empresarios, inversores y jóvenes talentos están próximos entre sí.
En Gran Bretaña, el gobierno de David Cameron, quiere convertir el área donde se ubican los Juegos Olímpicos de Londres 2012 en un centro de generación de empleo vinculado a la alta tecnología, basándose en la presencia de cientos de start-ups que han establecido una tienda cercana, en la parte oriental de la ciudad.
En Rusia, el gobierno está impulsando el desarrollo de un ambicioso proyecto de alta tecnología en la ciudad de Skolkovo, a las afueras de Moscú, incluyendo una nueva universidad, sitios de alta tecnología y empresas multinacionales. Rusia es una excepción, al menos en lo que a creación de negocios de Internet se refiere, sobre todo en el mercado doméstico. La venta de acciones del motor de búsqueda Yandex el año pasado fue la segunda mayor salida a bolsa de una compañía de Internet hasta la fecha, sólo por detrás de Google en 2004.
En Francia, el gobierno ha destinado más de mil millones de euros para un proyecto en el suburbio parisino de Saclay, en una zona en la que se encuentran varias de las grandes escuelas superiores del país. Sin embargo, proyectos como estos ofrecen poca esperanza ante la crisis económica actual ya que la universidad de París-Saclay, por ejemplo, no abrirá hasta 2014.
A pesar de que los gobiernos nacionales, la Comisión Europea y otros organismos públicos ya han invertido miles de millones de euros en inversiones de riesgo, están buscando nuevos incentivos. En Francia, por ejemplo, el recién elegido presidente, François Hollande, quiere reducir los impuestos para la creación de empresas. En Gran Bretaña, el gobierno de Cameron ha presentado recientemente un plan de inversión de las empresas que proporciona generosas exenciones de impuestos para las inversiones en start-ups.
El Fondo Europeo de Inversiones, que bombea dinero en fondos de capital riesgo en nombre de la Comisión Europea y otras fuentes públicas y privadas - de sus inversiones subyacentes han surgido Spotify y Rovio - ha puesto en marcha un nuevo plan para potenciar las inversiones iniciales de business angels.
Jean-Gabriel Bliek, director del desarrollo económico de Neuilly-sur-Seine, suburbio de París en el que recientemente se ha creado el proyecto de Neuilly-Lab sin financiación estatal, transformado en incubadora de start-ups, ve poco probable que una empresa como Facebook o Google surgiera en Europa debido a la alta competencia existente aunque insiste que en “Europa hay mucha energía e innovación”.