Si bien aún tímidamente, ya son varias empresas que ofrecen productos y servicios a través de la “antigua” caja tonta.
¿Usted se acuerda de aquella frase que utilizaba la caja tonta para definir al televisor? Sí, Usted tiene razón, se trataba de una elegante y discreta manera de calificar a sus contenidos como malos, mediocres o simplemente pensados para pasar el tiempo sin necesidad del uso del cerebro. Y, para ser sinceros, hay momentos, sobre todo ahora, con la que está cayendo, que estos últimos contenidos no dejan de cumplir una función sanitaria y social. Pero a lo nuestro. Desde hace unos años, la televisión ya no sólo da contenidos convencionales y unidireccionales; también permite ahora interactuar con ella o, incluso, utilizarla como vehículo de acciones que nada tienen que ver con el uso para el cual fue inventada la televisión. ¿Un ejemplo? Transferir dinero.
En Brasil, poco a poco las compañías se animan a ofrecer productos y servicios a través de este cómodo electrodoméstico. Tecnisa se anotó en esta movida. Pronto pondrá al aire una aplicación para los televisores de Samsung. A través de esta aplicación, los consumidores podrán acceder a mapas, planos e ilustraciones de las distintas ofertas de la promotora. E incluso el usuario podrá seguir por esta vía el avance – o no – de la propiedad adquirida. A los directivos de Tecnisa no se les pasó por alto que la mayor parte de los potenciales compradores realizan la búsqueda por Internet y desde su casa, sobre todo a la noche.
Posiblemente sea el Banco do Brasil el caso más curioso. En septiembre pasado, el banco llegó a un acuerdo con LG Electronics, para entregar las solicitud que permite realizar operaciones como, por ejemplo, transferencias. La aplicación cuenta hoy con 15 mil usuarios. Pronto, el Banco do Brasil lanzará la versión en televisores Samsung.
Lo cierto es que el éxito de estas aplicaciones está en relación directa con la cantidad de televisores con capacidad de conexión existentes en el mercado. Y, de acuerdo a un estudio de la consultora GfK Retail and Technologies, entre enero a octubre de 2010, la venta de estos televisores se incrementó un 517%, alcanzando 1,3 millones de unidades. La curva ascendente no se detuvo en 2011, ya que los fabricantes estiman que en ese año se vendieron dos millones de aparatos, representando el 20% de las ventas totales de televisores del país. Pero el plato fuerte se espera para el presente ejercicio: los fabricantes esperan alcanzar diciembre con cuatro millones de televisores vendidos. Esa cifra se traducirá en un 35% de market share.
Rafael Cintra, ejecutivo de Samsung – empresa que en 12 meses vio elevarse su pedido de aplicaciones de 50 a 350 solicitudes -, recuerda que las primeras aplicaciones que se lanzaron pertenecían a medios de comunicación y grupos de Internet, como UOL, uno de los pioneros en explorar este camino. UOL, el primer portal en visitas de Brasil, hoy ofrece aplicaciones para televisores de Sony, Semp Toshiba y LG Electronics, y sus responsables prometen que la lista crecerá en el transcurso de este año.
Brasil es actualmente el quinto país con más televisores conectados. Las empresas hacen colas para introducir sus aplicaciones. Los anunciantes, en tanto, aún siguen prefiriendo a los móviles y ordenadores, por ser éstos más masivos.
Por el momento, claro.