La demanda abarca a los usuarios de esa red social que publican la ubicación de controles de alcoholemia, radares y puestos de control de tráfico.
Esta decisión puede convertir al gigante suramericano en ser el primer país en aprovechar la intención de Twitter de colaborar con los Gobiernos, lo que no excluye la censura en caso de que éstos lo soliciten, siempre y cuando violen las leyes locales.
"Por lo que sabemos, esta es la primera vez que un país ha buscado aprovechar el cambio de Twitter en su limitación (de tuits) en ciertos países", sostuvo Eva Galperin, de la Electronic Frontier Foundation, con sede en San Francisco.
"Twitter le ha dado a los países la herramienta y ahora Brasil ha decidido usarla", agregó Galperin, quien describió a su fundación como una organización defensora de la libertad en el mundo digital.
Carlos Eduardo Rodrigues Alves, un portavoz de la fiscalía federal brasileña, dijo que la solicitud fue presentada el 6 de febrero.