Los grandes medios anglosajones están marcando el camino, especialmente “Financial Times” y “The New York Times”. La visión del mundo, los intereses, la ideología de la economía y los negocios, acordes con esta preponderancia, se están globalizando peligrosamente, escorando el pensamiento hegemónico en una deriva muy poco pluralista, con gran influencia en los mercados financieros. Las primas de riesgo, las clasificaciones crediticias y los vaivenes de los índices, no son ajenos a esta tendencia.
El diario económico británico ha alcanzado el millón de suscriptores para su aplicación Web que lanzó en junio pasado. Es el primer medio que permite descargar directamente sus contenidos informativos en formato para móviles inteligentes y tabletas, usando tecnología HTML5. Ahora, el 20% de todas sus páginas vistas provienen de esos dispositivos móviles y el 15% de las suscripciones. Es, con mucho, el segmento que más crece. www.ft.com es el primer medio de información económica del mundo.
El pasado octubre, el 95,5% del tráfico internet de tabletas en EEUU ha venido del iPad, según ComScore. Apple ha vendido 9,3 millones de iPad, el 68,3% del total mundial de tabletas, según IDC. Su dominio aún es abrumador. En Europa, el 61,1% del tráfico total de tabletas y móviles inteligentes proviene de iPhone y iPad, para Alemania, Italia, España y Reino Unido, dice ComScore.
También otro estudio de ComScore nos habla con elocuencia de cómo la gente consume información y noticias en EEUU. Usan el PC por la mañana, conectados en el trabajo. La tableta en el desayuno, durante las pausas del día y al irse a la cama. El móvil durante el tiempo libre, las horas de deporte o paseo. A la vista de esto, la prensa económica y la especializada se están dirigiendo al lector del sábado como nicho preferente. Es el reino del móvil y la tableta. (Ver gráfico).
Hay otra muy interesante tendencia en los medios de comunicación, acuciados por la caída de la publicidad y de sus circulaciones en medios tradicionales: empiezan a explotar su marca, su credibilidad, para negocios fuera de la información pura. Crean canales de venta grupal, de viajes, nichos temáticos muy específicos del lujo y la calidad. O aplicaciones de recetas de cocina para tabletas. O recomendaciones y ofertas para moda, para espectáculos, para deportes, etc. La credibilidad vende. Pero de eso hablaremos más despacio otro día.