Los recientes movimientos políticos y sociales en distintos países árabes han generado, como consecuencia indirecta, cambios en el mercado de los canales de noticias de esta región. Los más destacados aún están por llegar.
Al Jazeera y Al Arabiya han constituido durante años un pequeño duopolio de los canales árabes de noticias, sin embargo su hegemonía podría estar en entredicho debido a la llegada de nuevos canales, a raíz de los movimientos políticos y sociales de los últimos meses que han hecho aumentar la demanda de información en estas zonas del globo.
Uno de ellos se llamará Alarab y verá la luz gracias al grupo de medios Rotana, cuyo propietario es el príncipe Walid bin Talal, el segundo mayor accionista de News Corp. dueño de un 39% de las acciones de BSkyB. A pesar de ello, Rotana se ha constituido como una empresa independiente de la corporación controlada por Rupert Murdoch, y emitirá en colaboración con Bloomberg. En opinión de sus promotores la demanda de información sobre la zona es evidente y supera los movimientos sociales y políticos de los últimos meses. De hecho, uno de sus pilares cuando el año que viene comiencen las emisiones será la información financiera.
Por otra parte, Murdoch contraataca. British Sky Broadcasting tiene previsto introducir otro canal en asociación con Abu Dhabi Media Investment, que responderá al nombre de Sky Arabia. Contará con trece delegaciones en la región y los servicios centrales estarán ubicados en Abu Dhabi. Si se cumplen los pronósticos más optimistas la primera emisión podría llegar la próxima primavera.
Los vínculos de los empresarios que emprenden estas aventuras mediáticas – Abu Dhabi Media Investment está controlada por uno de los miembros de la familia que gobierna en el Golfo Pérsico- ponen en entredicho la imparcialidad de su línea editorial. Sin embargo, la necesidad de diferenciarse de sus principales competidores les obliga a abordar la controvertida información de los países de la zona árabe desde un ángulo distinto.
Se trata de dos proyectos ambiciosos que cuentan con el respaldo de importantes grupos de comunicación internacionales, que aportarían el músculo financiero necesario para ponerlos en marcha, y que podrían cambiar el panorama mediático de los canales de información en lengua árabe. Permaneceremos atentos.