En su experiencia como alto directivo de General Electric ha vivido situaciones injustas que refleja en un libro. Retrata empresas sin alma, solo interesadas en mantener la previsión de beneficios para mantener el valor en bolsa, en Diario de un ejecutivo desengañado. En clave de humor, expone las dificultades de hacer un buen trabajo mientras se convive con las enormes contradicciones e ineficacias del mundo empresarial. Muchos se sentirán reflejados.
¿Qué critica a las multinacionales?
En las mayores multinacionales, se predican y se describen valores, muy bien escritos en un decálogo de principios, que luego no se cumplen. Un ejemplo, defienden los valores fundamentales de la mujer, y aseguran que hombres y mujeres deben tener igualdad de oportunidades. Mientras decían esto, en los comités ejecutivo y de dirección de las muntinacionales estadounidenseusa éramos todos hombres, tanto en Europa como en Estados Unidos. No me creo la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres.
He visto como se han manejado las cuentas a capricho, y la falta de seriedad en el cumplimiento de objetivos y trabajo. La falta de compromiso con los equipos, los ascensos a capricho. Hablo de mis experiencias, que no significa que sean las únicas, verdaderas y exactas.
¿Cuál es la situación más dura que ha vivido?
En 1999, recibí un mail ordenándome la realización de un ERE de 120 personas, de una plantilla de 450 personas, en General Electric Capital ITS, filial de GE, en la que era presidente y consejero delegado. ¿Cómo dices a tu equipo que debe ir a la calle cuando habíamos ganado más dinero que el año anterior y crecíamos a dos dígitos? Negocié con la matriz, y logre rebajar el despido a 45 personas. A los pocos dias de realizarlos, la cotizacion subió. Esa es la razón por la que se toman estas decisiones, y no solo en GE. Yo tenía una relación cotidiana profesional con IBM, y viví el anuncio el despido de 30.000 profesionales en todo el mundo a principios de los años noventa porque no habían cumplido expectativas de beneficios, a pesar de haber sido cuantiosos.
¿Porqué describe este tipo de cosas? ¿No teme enfrentarse a las multinaciones, que detentan el poder económico?
Terminé desengañado de lo que veía a mi alrededor, y cuento lo que ví. No me enfrento a las multinacionales, no creo que todas funcionen así. Por ejemplo, ahora con la crisis hemos visto gestores que se han llevado cantidades millonarias de cajas de ahorros que debemos salvar. Banco Santander, por ejemplo, funciona bien y de forma totalmente diferente.
¿Cuales son las multinacionales más deshumanizadas?
De todas las multinacionales que he conocido, por haber trabajado o tener relaciones comerciales con ellas, GE es la más multinacional más fría que he visto, con diferencia, tenía este sesgo deshumanizado y contradictorio. En IBM, EDS, Fujistu y en muchas multinacionales tecnológicas he visto la situación de cambio radical con EREs por no cumplir objetivos, y aunque tuvieran beneficios abultados. No se si siempre era necesario. También trabajé en Bull, y no viví este tipo de cosas, tenían un concepto más humano y pegado a mi forma de ser.
En general, las multinacionales estadounidenses están más pegadas al concepto cortoplacista bursátil, y son más deshumanizadas. Las españolas y, en general, las europeas, están más humanizadas.
¿Qué es lo mejor de las multinacionales?
La capacidad económica que tienen para el desarrollo del negocio. Tienen caja para desarrollar proyectos o productos, algo que no sucede en muchas empresas españolas. Las multinacionales estadounidenses son muy rápidas en tomar decisiones, eso es muy positivo.
¿Por qué ha decidido ahora escribir este libro?
He pensado que tener treinta años de experiencias me permiten contarlas. Y si creo que puedo aportar algun valor a la sociedad, ¿porqué no hacerlo? Quiero llegar a la gente joven para decirles que sean más emprendedores, que lancen sus propios proyectos laborales, que no miren a las multinacionales cuando piensen en un buen trabajo. Tampoco que piensen en ser funcionarios como una salida segura.
¿No es un poco oportunista criticar a las multinacionales ahora que está en auge el movimiento 15M?
En absoluto, lo empecé a escribir hace cuatro años. No me convence la gente del 15M, van desbocados en algunos temas. Si pretenden resolver los problemas del mundo en modo asambleario tienen un grave problema, las asambleas no han funcionado nunca. Si quieren realizar aportaciones a la sociedad, que se conviertan en un partido politico como hicieron los verdes alemanes, con gran éxito. La única forma de cambiar el sistema es hacerlo desde dentro.
¿No se cerrará puertas laborales con este libro? ¿Es que está jubilado?
En absoluto. Tengo 57 años, soy empresario y tengo mi propio grupo empresarial, que va muy bien
¿Volvería a trabajar en una multinacional?
No, gracias. Con lo bien que se está en mi grupo empresarial de patrono. En nueve años he creado 250 puestos de trabajo, 25 este año y 40 el año pasado.