Pedro Blanco, responsable de la Gestión de Activos de Telecomunicaciones de Iberdrola, y Alfonso Beltrán, director general de IDEA, han compartido la opinión de que un cambio en el sistema energético español es posible a través del desarrollo de redes inteligentes, smart grids, que deriven en un consumo eficiente.
Según datos del IDAE, la energía que se consume en una vivienda española es equivalente a tres toneladas de petróleo, una de las cuales sólo se invierte en el coche. Beltrán ha recalcado que el coche eléctrico supondrá un ahorro importante en la economía doméstica, no sólo por el bajo coste de la carga, sino porque se podrá descargar en cualquier momento, aumentando el flujo de electricidad a la red.
Por otro lado, Blanco ha asegurado que el desarrollo de las redes inteligentes depende directamente de la capacidad de las compañías eléctricas del control de incidencias y del nivel de telegestión de contadores. Para ello, pide al Gobierno que emita un Real Decreto que permita su cambio, además de la unificación y regulación de tarifas.
Desde 2005, la Unión Europea ha apoyado el uso de las smart grids, estableciendo planes de ahorro energético que los países miembros deben cumplir. España se encuentra a la cabeza en cuanto al cumplimiento de la directiva de Bruselas, cuyo objetivo es ahorrar cerca de 200.000 millones de euros en el 2020.
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