Para muchos, Brasil es un país proteccionistas, para otros tantos, aplica las políticas correctas a la hora de defender la industria nacional, y en este aspecto ni los fabricantes de las tabletas –sector emblemático de la globalización– escapan a la regla.
En efecto, el Gobierno publicó los criterios que regirán la actividad de los fabricantes de tabletas y que les permitirá gozar de exenciones fiscales. Los proveedores de tabletas podrán no utilizar piezas nacionales hasta final de 2013. Sólo a partir de 2014 las tabletas producidas en Brasil deberán contar con un 50% de piezas de origen local.
Si se ven las estimaciones de la consultora IDC estamos ante un negocio de envergadura, ya que IDC vaticina que las ventas de tabletas en Brasil deben alcanzar las 300.000 unidades en 2011, sobre todo a partir del segundo semestre del año.
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