Los grandes medios se han dado cuenta de que los podcasts son una oportunidad para diversificar su acceso a un público mayoritario. El sistema de información por voz empaquetada ha salido de su nicho creador que fueron las emisoras de radio y se está extendiendo con rapidez.
Un directivo de 'The New York Times' ha señalado que el diario planea construir una franquicia en torno al éxito 'The Daily', que registra ya 3,8 millones de oyentes al mes. 'Financial Times' está yendo más allá, para abaratar los costes de transformar el texto en audio. Está trabajando con Amazon Polly para poner en marcha una tecnología que tarda tan solo entre uno y tres segundos en convertir artículos breves o largos en audio.
Algunos podcasts realizados por personalidades de la radio están llegando a la cima de las audiencias. Por ejemplo, 'Pod Save de People'. El podcast 'Chapo Trap House' gana unos 85.000 dólares al mes, según su creador, Patreon.
Pero también hay pequeños nichos rentables: Sparkle Stories es una compañía independientes que sirve más de 1.000 historias de audio originales para niños, cobrando por la suscripción 15 dólares al mes. Se lanzó con una campaña que logró un total de 48.000 dólares.
Los editores de libros también están apostando por el audio para recuperar lectores. La empresa sueca Storytell cuenta con una biblioteca de 60.000 títulos y opera en 15 países. Se ha aliado con Planeta y Penguin Random House para abrir brecha en el mercado en español y portugués. La oferta de audiolibros en España ha aumentado un 33% en un año y se espera que en 2018 alcance el 10% de la facturación editorial. En cinco años podría alcanzar el 30%.
El público se conecta cada vez más con el audio para hacer deporte, mientras está en los transportes públicos o en tiempo perdidos. En el futuro, con la conducción automática de los automóviles, miles de personas tendrán nuevas disponibilidades de tiempo libre para conectarse y el audio puede ser una de sus mejores opciones.