Aunque se trata de un smartphone, lo más importante del Ektra es su potente cámara de fotos, alrededor de la cual gira todo el producto.
Kodak fue el rey de la fotografía durante más de un siglo, pero la llegada de las cámaras digitales congeló el sueño de la icónica compañía estadounidense. Ahora, cuando los móviles son cada vez más potentes en fotografía y muchos usuarios están dejando de lado incluso las cámaras digitales, Kodak ha visto la oportunidad de volver a jugar en primera división. A fin de cuentas, nadie sabe más de fotografía que ellos.
Así, Kodak y Bullitt Group han lanzado al mercado el ‘Kodak Ektra’, un smartphone con una cámara tan potente que bien podría pensarse que se trata de una cámara de fotos con teléfono. Cuenta con 21 megapíxeles con enfoque rápido y apertura f2.0 y cámara frontal de 13 megapíxeles con enfoque automático.
El smartphone permite realizar ajustes en tiempo real para seleccionar las condiciones deseadas en cada fotografía. Además, incluye un modo manual que permite ajustar la exposición, ISO, enfoque, balance de blancos o velocidad de obturación, como sucede con las cámaras réflex, cuyo concepto Kodak ha sido capaz de trasladar a un móvil, respetando el tamaño y el peso de un smartphone habitual.
Además, incluye un software de edición y retoque fotográfico y una app específica para imprimir las fotografías que seleccione el usuario.
Con este smartphone, Kodak no sólo rinde homenaje a la cámara Ektra, lanzada por la compañía en 1941, sino que recupera terreno en un campo, el de la fotografía, liderado por los móviles y pone en el mercado un dispositivo que hará las delicias de los amantes de esta afición con tintes de arte.
El teléfono
puede adquirirse a través de Internet y
cuesta 500 euros, en parte debido a sus especificaciones técnicas: un
procesador de diez núcleos, pantalla de cinco pulgadas con calidad full HD,
3GB de RAM y 32 GB de almacenamiento, batería de 3.000 mAh y Android 6.0.