La salida de Reino Unido de la UE ya se está cobrando sus primeras víctimas. Desde que los británicos optaran por el Brexit, el coste del papel de periódico ha aumentado un 8% (de 330 a 360 libras por tonelada), informa ‘Financial Times’. En cambio, el coste del papel para los editores europeos se ha mantenido estable en 440 euros por tonelada.
La razón de esta diferencia reside en que la mayoría de los diarios británicos importa sus suministros de papel de las fábricas europeas, principalmente escandinavas, y de América del Norte, donde los precios también han aumentado este año de 560 a 600 dólares por tonelada.
Pero lo peor está por venir. Algunos analistas predicen que el aumento de precios del papel será de dos dígitos en 2017 y que continuará el deterioro del mercado de la publicidad impresa.
El mayor proveedor de papel de periódico de Europa, UPM, ha asegurado que los aumentos de precios no se deben solo a la caída del valor de la libra esterlina, sino también a un aumento simultáneo en el precio de la pasta reciclada, una de las principales materias primas en la producción de este material. Además, como nadie está haciendo dinero de este negocio, los fabricantes están reduciendo su actividad o dedicándose a otros negocios.
Sin el problema del alto coste de la impresión, los periódicos ya estaban en peligro. ‘The Guardian’ anunció 250 despidos, un mal que afecta también a Telegraph Media Group o DMGT. La prensa gratuita, dependiente de la publicidad, solo recibe golpes, y los periódicos de pago no han tenido más remedio que elevar el precio en quiosco, reducir la paginación o usar un papel de menor grado para mantener los costes de impresión.
¿Qué sería lo más inteligente? Seguir los pasos de ‘The Independent’, que cesó su actividad impresa en marzo de este año porque su modelo económico no era sostenible. Querer ser el último superviviente del papel ya no suena tan heroico.