Las Autoridades monetarias del país analizan los riesgos y oportunidades que supondría crear su propio Bitcoin.
El Riksbank (Banco Central de Suecia) fue pionero en la impresión de billetes en papel. De hecho, es el banco central más antiguo del mundo: fue fundado en 1668. Pero eso no es más que una anécdota en el mundo actual, donde la tecnología es capaz de revolucionar lo inimaginable. Como el dinero.
Ya existen muchas criptomonedas, pero ninguna está respaldada por un banco central, por lo que se pueden considerar negocios privados o proyectos sin ánimo de lucro que no tienen garantías financieras reales que aseguren ese dinero digital. Suecia está valorando dotar de esas garantías a una criptomoneda propia para el país. Conviviría con las Coronas suecas, la moneda del país (pues Suecia no es miembro de la Zona Euro). “No tenemos a nadie a quien mirar sobre cómo diseñarlo y cuáles son las posibles consecuencias… Pero no es una opción para nosotros el no hacer nada”, ha explicado Cecilia Skingsley, vicegobernadora del Riksbank, al Financial Times.
La mayor preocupación es el aumento de la inestabilidad económica que podría provocar la convivencia de dos monedas en el país, ya que algunos ciudadanos podrían utilizar la criptomoneda como refugio para su dinero en tiempos de crisis económica. Estos y otros aspectos son los que, en un plazo de dos años, va a analizar el Banco Central sueco para determinar si finalmente crean su moneda digital.
En España, un informe de Hacienda estimó que es técnicamente posible eliminar el dinero en efectivo y sustituirlo por una moneda digital, pero se trata de un estudio más que de un proyecto real.
Lo que sí es una realidad, sobre todo en los países escandinavos, es que
la cantidad de monedas y billetes en circulación ha caído un 40% desde 2009. Este descenso se debe, en parte, a propuestas como la de Dinamarca, donde la desaparición del efectivo es un hecho que llevará a cabo en los próximos años gracias a
una nueva legislación que permite a los comercios negarse a aceptar monedas y billetes.