Los dos diarios han ofrecido al Consorcio su colaboración para seguir rastreando los más de 11 millones de documentos de los papeles de Panamá.
Más vale tarde que nunca. Este famoso refrán se puede aplicar ahora al Washington Post y al New York Times, dos de los periódicos más prestigiosos dentro y fuera de los Estados Unidos, ya que ambos, casi al mismo tiempo, han solicitado al Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) unirse a ellos para rastrear los papeles de Panamá, la mayor filtración de la historia del periodismo.
“Estamos encantados de poder trabajar con el New York Times y el Washington Post, dos de los mejores periódicos del mundo”, explica Marina Walker, directora adjunta del ICIJ. “Ambos se han registrado hace dos o tres semanas y ya están siendo entrenados por los investigadores y reporteros del ICIJ sobre el uso de datos”, añade.
El anuncio llega un mes después de la publicación de la filtración en más de un centenar de medios de comunicación de todo el planeta, que colaboraron estrechamente entre sí y con el ICIJ durante un año para extraer de los 2.600 GB de información filtrada datos con los que publicar noticias.
En Estados Unidos fueron el Miami Herald, del Grupo McClatchy, y Univisión los medios que colaboraron con el ICIJ desde el primer momento. Sin embargo, para el Washington Post no es la primera colaboración con el Consorcio, dado que en 2013 ya participaron en Offshore Leaks. “Ya que habíamos tenido relación con ellos previamente, fue más fácil. Todo el mundo en el Post estuvo de acuerdo en que podría ser bueno para nosotros unirse a la coalición”, explica Jeff Leen, editor de investigación del Washington Post. No obstante, el hecho de que ya hubieran colaborado con el ICIJ plantea el interrogante acerca de la ausencia del diario de Jeff Bezos, fundador de Amazon, en el proyecto de los papeles de Panamá.
En el caso del New York Times, su ausencia como colaborador en la filtración le valió críticas de algunos lectores, a lo que se sumó que en un principio restasen importancia a las historias que comenzaron a publicar otros medios como parte de la filtración, explica Alicia Shepard en Nieman Lab.
Rectificar es de sabios, dice otro refrán. Y este también se puede aplicar con acierto a estos dos diarios en este caso, ya que, aunque desde el propio ICIJ lamenten que algunos medios no quieran acostumbrarse a trabajar de manera cooperativa con otros medios y no estén dispuestos a compartir horas de trabajo y cientos de datos,
parece que la investigación transfronteriza es el futuro del periodismo de investigación y que no ha hecho más que empezar.