--El objetivo número uno es dotar de conexión a Internet a todos los habitantes de la Tierra. En la convención anual F8 para desarrolladores, Zuckerberg aseguró que ya no pertenecemos a un mundo de comunidades aisladas, aunque las naciones se están replegando en ellas mismas y pidiendo la construcción de muros. En su opinión, el camino a seguir es “unir a la gente, no apartarla”. En su empeño de conectar los dos tercios de población que no tienen acceso a la red por distintas razones, ha desarrollado dos nuevos proyectos: Terragraph, para ofrecer Internet inalámbrico de muy alta velocidad en ciudades y Aries, que transmitiría datos a largas distancias.
--La red social ya controla el mercado de las aplicaciones de mensajería, con Facebook Messenger y Whatsapp triplicando el número de SMS que se envían a diario: 60.000 millones frente a 20.000. El siguiente paso será permitir a otros desarrolladores incorporar chatbots (software que se comunica con humanos) que posibiliten la realización de gestiones con marcas y comercios, la solicitud de servicios o la recepción de contenidos como actualizaciones del tiempo, tráfico o últimas noticias.
--Facebook pone a disposición de las empresas su plataforma para vender más, por lo que la plataforma también podrá hacer más dinero de ellas. A través de la herramienta “La Historia de tu empresa”, los 50 millones de pymes presentes en la red social pueden mostrar sus productos y promociones a través de un vídeo-presentación. En cuanto a sus tres millones de anunciantes, tienen a su disposición Facebook Canvas para crear anuncios con los que el usuario podrá interactuar.
--Facebook Live permite emitir vídeos en directo y tiene mucho más potencial de crecimiento que Periscope, de Twitter. Facebook tiene claro que éste es el futuro del vídeo porque dispara el feedback entre el emisor y el receptor: un vídeo en directo recibe 10 veces más comentarios que uno grabado. Zuckerberg dio a conocer una API que permitirá integrar Live en plataformas de terceros, como el dron que sobrevolaba el evento transmitiendo en vivo para Facebook.
--Con la comercialización de Oculus Rift, accederemos a una nueva dimensión. Para Zuckerberg, la VR tiene una alta aplicabilidad social y la AR será artífice de una transformación radical en la que el mundo tendrá una superposición digital. El empeño de Facebook es que dos personas que se encuentren lejos tengan la sensación de estar presentes en el mismo lugar. Y esto solo es posible si la tecnología es tan avanzada que hasta acabe desapareciendo para posibilitar la inmersión completa. Por si esto fuera poco, a finales de 2016 Oculus pondrá a disposición de los usuarios unos controladores táctiles que permitirán tocar y manipular objetos. Zuckerberg también se atrevió a aventurar que los dispositivos de VR del futuro se asemejarán a unas gafas de ver corrientes.
--Facebook está comprobando que los usuarios cada vez están menos dispuestos a compartir informaciones personales (según la web “The Information”, se redujo un 21% a partir de mediados de 2015) y lo que publican son noticias de webs externas. “Bloomberg” asegura que Mark Zuckerberg ha insistido a su personal que es necesario volver a potenciar este valioso intercambio personal de información entre usuarios. De este empeño han nacido iniciativas como los recuerdos de años pasados, los recordatorios de fechas señaladas o la invitación a publicar las fotos más recientes hechas con sus smartphones.
--Desde el 12 de abril, Facebook Instant Articles está disponible para cualquier medio de comunicación del mundo. Los contenidos que las compañías periodísticas alojan en este espacio reportan a la red social gran cantidad de tráfico, mientras que los medios reciben el 70% de los beneficios publicitarios y la posibilidad de acceder a diferentes analíticas. Herramientas como ésta nos están permitiendo entrar en la era del consumo social de noticias.
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