Evidentemente los datos de “El Mundo” no son buenos. En marzo, las ventas del diario registraban un fuerte retroceso del 16%. En un año ha perdido cerca de 20.000 ejemplares. Además, “ElMundo.es” ha perdido el liderazgo digital de la información en lengua española después de que en buena parte del año pasado mantuviese un liderazgo de largo recorrido. Según los datos de marzo de comScore, “ElMundo.es” estaba en 13,4 millones de usuarios únicos, por debajo de “ElPaís.com”, que registra 14,3 millones. Los datos de Alexa del pasado lunes confirman esa tendencia: “ElMundo.es” aparece en el puesto 537 del “Global Rank”. “ElPaís.com” aparece en el puesto 473. Además, hay que anotar que el tráfico de “El Mundo” debe mucho, tal vez demasiado, a la gente que entra para ver la programación de televisión o usar el traductor, lo cual tiene poco que ver con la información y el periodismo.
Casimiro García-Abadillo ha dicho que su salida de la dirección tiene que ver con su perfil “poco digital”, según le dijo Fernández-Galiano. ¿Acaso David Jiménez, el nuevo director, es un gran experto en periodismo digital? Para experto en digital ya tenían a Pedro J. Ramírez, el periodista que está demostrando su vocación digital con su nuevo proyecto “El Español”. Los editores en dificultades tienden a nombrar como directores de medios a profesionales más “flexibles” o “asertivos”, lo cual suele redundar en empedrar la bajada a los infiernos.
Unidad Editorial es un grupo que atraviesa enormes dificultades, bajo la batuta de Fernández Galiano. El año pasado sus ingresos descendieron el 3,65%, las ventas de “El Mundo” cayeron un 10,8% y su plataforma digital Orbyt sigue de capa caída. Su EBIDTA sigue negativo y su deuda supera los 250 millones de euros. En estas circunstancias, pretender llevar a cabo la reconversión digital del grupo es una quimera. Como dice Jeff Jarvis en su reciente libro “El fin de los medios de comunicación de masas”, la transformación digital requiere grandes inversiones, mucha experimentación y una gestión decidida y clarividente al más alto nivel. Así lo han hecho, por ejemplo, potentes grupos como el alemán Axel Springer, comprando startups tecnológicas en cadena y obligando a sus más altos ejecutivos a seguir in situ la transformación tecnológica que se está produciendo en Silicon Valley. El informe de Pew que publicamos ampliamente a continuación, muestra algunas de las claves de la inmensa tarea que tienen por delante los medios de comunicación que quieran sobrevivir en la era digital. Resulta que los gigantes de Internet se llevan la inmensa mayoría del pastel económico del futuro, que está marcado por los ingresos de la publicidad móvil. Los que producen los contenidos se reparten las migajas sobrantes. Con esta tendencia, ¿cómo pueden financiar una aventurada y costosísima transformación?