Las quejas de los editores online en Francia han sido escuchadas y el gobierno de François Hollande ha manifestado que a partir de febrero aplicará a los medios de comunicación en Internet el mismo tipo súper reducido de IVA que el de la prensa escrita, informa “Les Echos”.
Los sindicatos pedían acabar con el trato desigual que se había establecido desde el nacimiento de la prensa digital con respecto a la impresa. Los periódicos y revistas tradicionales disfrutaban de una protección fiscal que les ha permitido el pago del 2’1% de IVA, mientras que con los medios digitales se aplicaba la tasa general del 20%.
Esta decisión de igualar los derechos de las empresas periodísticas, independientemente del soporte en el que se editen, choca frontalmente contra la normativa de la Unión Europea, que prohíbe alinear las dos tasas, considerando las noticias online como un préstamo de servicios, mientras que la prensa escrita equivaldría a una entrega de bienes.
Este debate sigue hoy en día vigente en todos los países de la Unión, entre ellos España. En nuestro país se mantiene la diferencia de trato fiscal para las empresas de medios, con tasas del 21% para las que eligen una plataforma online para su distribución y un 4% para las que lo hacen en papel. Este desajuste también se produce con los libros electrónicos frente a los impresos.
En Francia, los editores llevan años señalando que la única diferencia entre los dos tipos de prensa es el soporte en el que se consumen sus contenidos, lo que no justificaría ni el argumento dado por la UE ni su baremo a la hora de aplicar las tasas.
Las empresas digitales francesas han calificado este paso hacia delante de su gobierno como “una decisión valiente”. Un gran alivio para sus negocios, que podrán aumentar su oferta digital de pago sin depender de la publicidad y retomar antiguos proyectos que quedaron en el aire.
Antes de este anuncio, las empresas Mediapart, Indigo y Terra Eco llevaban tres años desafiando la ley al acogerse al tipo súper reducido del 2’1%. La medida no es retroactiva, por lo que su desobediencia anterior deberán resolverla con la administración fiscal y pagar las sanciones correspondientes.