“Si Darío es un mutante, yo soy un marciano que expliqué en un artículo en La Vanguardia hace unos años por qué leía libros electrónicos”. Con esta confesión, Albert Cuesta tomó el relevo de la anterior mesa redonda para seguir hablando de tecnología enfocada al sector editorial.
La ponencia se centró en las tabletas, un dispositivo del que se han vendido 250 millones de unidades en todo el mundo, superando al televisor y al ordenador. Hasta ahora Apple había acaparado las ventas, pero en el segundo trimestre de 2013 apenas representa el 50% del total gracias a la fuerte competencia ejercida por Amazon, entre otras.
Antes existía una dicotomía: ¿qué elijo para leer, tabletas o ereaders? Pero ahora ya existen dispositivos que cuentan con las mejores características de cada uno de ellos: relojes digitales, pantallas enrollables de Samsung y LG o phablets, que triunfan en el mercado coreano.
La primera ponente, Koro Castellano, directora de Kindle España y Portugal, comenzó presentando sus tres nuevas Kindle Fire. Además de contar con una tecnología eficiente, cumplen con la función de ofrecer cualquier libro para ser descargado en 60 segundos. Hoy ofrecen 75.000 títulos en castellano, de los que unos 45.000 cuestan menos de 5’99 euros.
Kindle cuenta con varias iniciativas para fomentar la lectura: Kindle Flash, que pone diariamente a la venta un libro a menos de dos euros y eBooks Indies, que da cabida a obras creativas y diferentes de autores independientes.
Koro, que reconoce que Amazon ha ayudado a las editoriales a apostar por alguien que ya ha vendido miles de unidades en su web, también destaca que lo importante es dar al lector la llave para acceder a todo tipo de productos de entretenimiento, porque lo fundamental es el contenido y que el lector olvide el formato que tiene entre las manos.
Xavier Sola, responsable de Casadelibro.com y el nuevo soporte de lectura Tagus, considera que el eBook se ajusta perfectamente a los hábitos de consumo que presentan los lectores modernos. Su objetivo es entender las necesidades del usuario y reflejarlas en el mundo digital. Porque es el cliente quien decide cómo, cuándo y dónde lee.
Cuestionando a sus lectores, desarrollaron su propio sistema que hoy cuenta con más de 70.000 referencias en español y al que se han acogido colectivos como CEGAL, Casa del Libro o Universia, pero cada uno conservando sus clientes.
La experiencia Tagus posibilita la lectura con conexión a la red o sin ella. Los libros se pueden subir a la nube por si en unos años el usuario decide cambiar el dispositivo.
Por último, se mostró esperanzado en que las librerías del futuro servirían para algo más que para el showrooming, fundamentalmente vendiendo eBooks, ya que hay lectores que no quieren dar sus datos en Internet y prefieren pagar en la tienda y obtener un código de descarga.
La última intervención llegó de la mano de Luis Collado, director de Google Play y Google Books España. Collado sostiene que la tecnología seguirá avanzando, ofreciendo nuevas posibilidades.
Desde Google pretenden aprovechar las ventajas de los dispositivos móviles: todo tu ocio en cualquier sitio, sin restricciones de soporte, tiempo o espacio. Además, con un sistema lo más universal posible, sin obligar a que la gente adquiera los ebooks en Google Books, sino que puede guardar los que haya comprado en cualquier otro sitio, incluso documentos personales.
“La lectura en tableta puede ser tan sencilla o complicada como queramos”. Y es que este dispositivo permite mejorar la experiencia del usuario con fotos, audios, vídeos… Cada empresa ofrece sus particularidades, como la información cartográfica de Google o pronto Google Glass, que pasará las páginas por nosotros de un libro que no tendremos en nuestras manos.