El informe que ha presentado esta semana la Asociación Italiana de Editores (AIE) muestra una evolución del e-book en Italia que anima el optimismo del sector. Para Andrea Angiolini, el presidente de la Comisión digital de la AIE, se nota un cambio decidido y progresivo y “el sector ha empezado la transición al digital adaptándose a los diferentes lectores y tipologías de libros”. “El digital no es una elección, es un destino obligado”, afirma Angiolini.
Actualmente en Italia los e-books representan el 1,8% del volumen total del mercado editorial (el mismo porcentaje que en Francia), con un crecimiento del 89% en el último año. Y según las estimaciones, este porcentaje puede llegar al 6% en 2014. El 44,6% de las novedades editoriales se publican también en versión digital. Entre 2011 y 2012 aumentó en un 63% el número de personas que comprado un e-book y en un 45,5% el de los lectores. A diferencia del mercado estadounidense, en Italia el libro electrónico es más leído entre los hombres (61,5%) que entre las mujeres (38,5%). En 2012 se vendieron en Italia 3,5 millones de e-books por un total de unos 17 millones de euros. Un factor que favorece la venta es también la bajada de los precios ya que, como señala un estudio de A.T. Kearney-Bookrepublic, en los últimos dos años la media ha pasado de 10-12 euros a 6-7.
También a nivel institucional se está fomentando la difusión del e-book y el Gobierno italiano ha puesto de manifiesto su apuesta por las nuevas tecnologías con un decreto que obligará, para el curso escolar 2014/2015, a utilizar libros digitales o mixtos en las denominadas Escuelas 2.0. Un dato sorprendente que refleja la tendencia progresiva en este sector es el hecho de que, según los datos de Amazón.it, Infierno de Dan Brown ha vendido más copias en formato electrónico que en papel. Es el primer caso de un best-seller que en Italia vende más en versión e-book que en papel. Una noticia esperanzadora para todo el sector.