Mientras los grandes grupos editoriales buscan modelos rentables y una eficiente transformación hacia el ámbito digital, otros negocios vinculados a la industria de los contenidos en papel ven como su existencia requiere también una reconversión. Entre ellos se encuentran los quioscos de prensa diaria, un sector que en los últimos años ha visto descender su cifra de clientes como consecuencia de la desaparición de ediciones impresas y la proliferación de medios digitales.
Pues resulta que su viabilidad podría estar en la vinculación a un sector en crecimiento como es el e-commerce. Así lo plantea un estudio realizado por Red.es, la Asociación Nacional de Empresas de Internet (ANEI) y la Asociación de Vendedores Profesionales de Prensa de Madrid (Avppm), en el que se plantea su utilidad como lugar de recogida de los productos comprados por Internet. Dicho análisis concluye que más de un 81% de los usuarios estaría de acuerdo con dicha solución. Eso sí, no lo ven conveniente para todo tipo de productos, sino esencialmente para aquellos de tipo cultural (más del 80%) y en menor medida (entre un 25 y un 30%) para ropa, equipos informáticos y otros equipos electrónicos.
Actualmente, la mayoría de los consumidores de e-commerce (81,5%) optan por el envío de sus artículos a casa. El estudio plantea que esto podría deberse a la existencia de una oferta limitada de puntos de recogida, panorama que podría ser más atractivo con la incorporación de los quioscos de prensa a la red. Además, estos establecimientos generan confianza entre los usuarios. De ahí que los consumidores que ven con buenos ojos estos puntos de conveniencia, los prefiera, entre otras razones, por su capacidad para resolver problemas. Otra de sus fortalezas es la posibilidad de poder recoger el producto en el momento y día que se quiera.
Tras comprobarse que la propuesta de transformar los quioscos en puntos de recogida del comercio electrónico, cuenta con el beneplácito de las tiendas y también de los usuarios, el estudio establece que es necesario salvar algunos escollos como las limitaciones de almacenamiento de los quioscos, definir un sistema de remuneración adecuado (más de la mitad de los consumidores no está dispuesto a pagar más por recoger sus comprar en el quiosco), y establecer un método tecnológico que garantice la fiabilidad de entrega.