Los móviles tradicionales están llamados a convertirse en una rareza, unos aparatos de gama baja indicados para personas que sólo quieran llamar y mandar SMS. A juzgar por los números, este colectivo es cada vez menor: la mitad de los 42,2 millones de aparatos vendidos a lo largo del año en Europa occidental ya son móviles inteligentes.
El cambio de tendencia en los mercados está favoreciendo a los que apostaron por los smartphones. Samsung ha obtenido un éxito espectacular con su modelo Galaxy, que explica por qué sus ventas de dispositivos inteligentes se han disparado un 700%, según un estudio de la consultora IDC. Este impulso ha afianzado la posición de la empresa como líder indiscutible de ventas en Europa, con casi 14 millones de aparatos vendidos. Sin embargo, las compañías que sólo tienen en su catálogo terminales de última generación han logrado datos comparativamente más representativos.
La evolución de la taiwanesa HTC, que ha basado su estrategia únicamente en los dispositivos inteligentes, ha conseguido duplicar sus ventas hasta los 3,1 millones de unidades despachadas. Por delante de ella está Apple, otra firma que se ha especializado en los smartphones con su estrella, el iPhone. La empresa que preside Jobs está cerca de duplicar sus ventas con 4,6 millones de pedidos hasta el tercer trimestre del año.
La apuesta por los móviles de nueva generación parece ser un buen remedio para luchar contra la crisis que también se nota en este sector. De hecho, en lo que va de año las ventas de teléfonos móviles han caído un 3%. Nokia concentra gran parte de la caída, pero aun así se mantiene como segundo fabricante en ventas en Europa.
La situación económica explica el descenso en el ritmo de renovación del parque de teléfonos, pero Francisco Jeronimo, de IDC, apunta otras razones como el compás de espera de muchos compradores que están esperando el lanzamiento de los nuevos y esperados modelos de HTC y Apple, previstos para final de año.
Para Jeronimo, tampoco cabe menospreciar la fidelidad de los consumidores de Nokia, que están esperando el reemplazo del sistema operativo Symbian por el Windows Phone. La decisión de una u otra plataforma no es baladí. De hecho, la adhesión de ciertos fabricantes como HTC, Samsung y Sony Ericcson a Android está detrás de gran parte del crecimiento de ventas registrado en los pasados meses, según estas fuentes.