Sábado 15 de noviembre de 2014
Management
Hemos escrito ya en reiteradas ocasiones sobre el wellbeing, la importancia de una dieta sana y la práctica de ejercicio, así como la meditación, como técnicas que son esenciales para bajar el nivel de estrés y logran no sólo un mejor rendimiento en el trabajo, sino una notable mejora en nuestra calidad de vida. Todo ello derivado de la cantidad de horas diarias que dedicamos a nuestro trabajo, que pueden pasarnos factura si no tenemos en cuenta cuáles son los mecanismos que desactivan la energía negativa.
Laura Hames Franklin que se define a sí mismo como entrenadora del cuerpo, salud y vida, afirma que si bien el yoga es importante como actividad de relajación y sirve para la meditación, no implica que sea una fuente exclusiva para canalizar nuestras tensiones (agregamos nosotros – no necesariamente problemas).